Pensamientos de la Madre Magdalena de Jesús, Carmelita descalza (1915-2012) IV
32.- Hija mía, ¡está más contento hoy Cristo Nuestro Bien! ¿A que V.C. también se siente como más ligera y con deseos verdaderos de buscarle a Él por sus caminos y no los de V.C.? ¡Qué bueno es este Señor Nuestro del alma y cómo se deshace en cuanto ve un poquito de humildad!
33.- La soledad del desierto ha buscado el precursor para asemejarse a Cristo, aumentando así su amor. Por eso, hoy que es su día, nos invita ¡a lo mejor!, a tratar en escondido amores con el Señor. ¡Dale gracias hermanica por tan gran predilección!, y que Jesús sea el Dueño total de tu corazón.
34.- Si V.C. va dejándose en manos de la obediencia y con paz, y no queriendo más que contentarle, se irá asentando y posando y madurando en Él, dejando su amor propio a un lado. Salvará las almas de los suyos… amándole mucho.
35.- No pierda la unión con la Virgen, que Ella le enseñará lo que debe hacer, con mucho amor.
36.- Que sus penitencias le sirvan para vencer su natural para poder ir al Señor con más facilidad y más llenez.
37.- Búsquele a Él sólo para que se encuentre a gusto y pueda ser V.C. el recreo de Jesús que siempre la espera.
38.- Ponga amor y saque humildad, que es imprescindible para intimar con Cristo.
39.- Su voluntad puesta en la Suya, ¿qué mejor cosa puede desear?
40.- Olvídese de sí sobre todo en lo interior, para que sea Él su único huésped y obsesión.
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